Obras abandonadas afectan a los vecinos
Ellos reclaman la reanudación de los trabajos en la Ricardo Rojas, en la costanera del Canal Maestro y en el puente de Villa Warcalde.
29/08/2012 00:01 , por Redacción LAVOZ
Un grupo de vecinos, centros vecinales y organizaciones sociales del noroeste de la ciudad de Córdoba suscribieron una nota que presentarán a autoridades provinciales y municipales para que se retomen las obras abandonadas en el sector desde finales del año pasado.
Esta es la zona de la ciudad que más creció en la última década. Se multiplicó la cantidad de tránsito circulante en sus calles y avenidas, por lo que se volvió imprescindible una serie de obras viales que se comenzaron pero luego quedaron abandonadas.
El pedido está suscripto por vecinos de Villa Rivera Indarte, Quisquisacate, Villa Quisquisacate, Argüello Norte y Villa Warcalde. Solicitan que se retomen las obras abandonadas de duplicación de calzada de la avenida Ricardo Rojas, de la costanera en el Canal Maestro Norte y del puente de Villa Warcalde (ver Mapa de reclamos).
En 2008 se prometió la ampliación y duplicación de un tramo de 3,9 kilómetros de Ricardo Rojas, comprendidos entre el CPC de Argüello y la avenida Bodereau. Se empezaron a construir dos calzadas de nueve metros cada una. En algunos sectores están separadas por las vías del ferrocarril, y en otros se construye un cantero.
La obra presenta un avance del 40 por ciento. Se terminaron los tramos de rotonda Rafael Núñez hasta calle Heriberto Martínez; de calle Viracocha hasta Progresiva 2,72; y desde Progresiva 2,98 hasta Bodereau. Los trabajos se abandonaron a finales de 2011 y, pese a la promesa del Gobierno provincial de retomarlos en junio pasado, todavía siguen paralizados.
La costanera sobre el Canal Maestro Norte fue anunciada por el entonces gobernador, Juan Schiaretti, a principios de 2011. La intervención era sobre los 2.800 metros que van desde la avenida Bodereau hasta Donato Álvarez. Incluía la construcción de dos calles de siete metros de ancho, con veredas de 2,5 metros, iluminación, puentes nuevos y un tratamiento paisajístico.
Al igual que con Ricardo Rojas, los trabajos se abandonaron a finales del año pasado a la altura de calle Sinchi Roca. Desde la Provincia informaron que la obra tiene un avance del 24 por ciento, y que se intimó a la empresa a que retome los trabajos en una semana. Si no lo hace, habrá un nuevo llamado a licitación.
La otra obra abandonada es la del puente de Villa Warcalde. Consta de dos nuevos puentes de amplias calzadas sobre el río Suquía y la demolición de la actual estructura. Los trabajos comenzaron a ralentizarse en marzo, y en mayo fueron definitivamente abandonados.
La Municipalidad se comprometió a retomar los trabajos en reiteradas oportunidades. El financiamiento es a través de la Dirección Nacional de Vialidad.
Las otras obras abandonadas son la pavimentación de calles en barrio Argüello Norte y la colocación de material 0,20 en las calles de Villa Warcalde, tal como se había aprobado en el Presupuesto Participativo.
Más reclamos. Sobre la Ricardo Rojas, los vecinos solicitan algún tipo de señalamiento, semáforo o control de tránsito en los cruces con las calles Huarpes y Tomás Garzón. También quieren que se solucione la peligrosa intersección con Doering, en frente al CPC Argüello.
En Donato Álvarez los problemas identificados por los vecinos son, además del mal estado general de la calzada, dos: falta un semáforo a la altura del cruce con Médica y un giro a la izquierda en la esquina con Valeria Beta.
Los reclamos también recaen sobre los problemas de anegamiento. Los vecinos denuncian que la avenida Bodereau se llena de agua cada vez que llueve por la falta de desagües en una urbanización privada a la altura de la Monte de los Gauchos. Y en barrio De los Bioquímicos, por la construcción de un conjunto de viviendas de una cooperativa, que no incluyó el desagüe necesario para evitar las inundaciones.
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